“La Casa Viva”-Valencia

El fin de semana pasado estuve en Valencia y descubrí el que se ha convertido en mi restaurante favorito. Se trata de un restaurante vegetariano y vegano llamado la Casa Viva, situado en el barrio de Ruzafa. 

Allí coincidí por casualidad (o como ellos dicen, por causalidad) con la pareja más bonita y maja de instagram, Sagri (@vegantreschic) y Carlos (@charlesgreenvegan) y acabamos comiendo juntos en una especie de barra baja cerca de un gran ventanal. 

Pedimos todo al centro: 

Como entrante el CORAZÓN DE MASAKO CON SALSA DE DÁTILES MEDJOOL, que no te puedes perder si, como yo, eres fan del contraste dulce-salado y unas TIRAS DE YUCA FRITAS, también muy ricas y para nada aceitosas o grasas. 

De segundo nos decantamos por la LASAÑA DE CALABAZA MACROVEGANA compuesta por una bechamel de calabaza, láminas de yuca, salsa macrovegana de shitake con nata de avena, champiñones y queso vegano. Por último, pedimos la PIZZA SUAVE CON BASE DE YUCA que lleva calabacín, queso vegano, rúcula y orégano, todo sobre una suave salsa de anacardos, shiitakes frescos, cebolla, levadura de cerveza y cúrcuma. No estoy exagerando si digo que es la mejor pizza que he comido.

La base de la pizza la eliges tú: negra (con carbón activo), fina, rosa (de remolacha), yuca y mijo. Las dos últimas una opción perfecta para intolerantes al gluten J

Es el segundo restaurante que abre esta familia. El primero está situado en Tabernes de la Valldigna, un pueblo a 50 Km de Valencia y donde también tienen un hotel. Si queréis saber más os dejo su página web: https://lacasaviva.com

Es un sitio con un encanto especial, y no sólo por la comida, sino también por la decoración, ya que ellos mismos se han encargado de restaurar el local, cuidando hasta el máximo detalle. De hecho, en la decoración del restaurante han puesto algunas fotos del proceso. 

Todo es casero: el queso vegano, que está increíble y hasta huele a queso (hasta pregunté por si me había equivocado jajaja) y la yuca en sus diversas presentaciones; láminas, masas para pizza o el pan, al que no tengo ni palabras para describir. Me contaron que lo preparan ellos solamente con agua, yuca y sal. Nada de aditivos, conservantes, gomas u otros productos que les suelen añadir a los panes sin gluten y por los que encima te cobran suplemento. 

Me gustó tanto que al día siguiente volví para comer sola y esta vez pedí de entrante un CUÑAPÉ. Normalmente vienen tres, pero la chica fue tan amable que me ofreció ponerme una sola para probar y ¡menos mal!, porque decir que estaba deliciosa es quedarme corta. Es una minihamburguesa de tofu y shiitake acompañada con salsa de tomate casera, calabacín y lechugas variadas en pan casero de yuca.

Como plato principal opté por la LASAÑA DE ESPINACAS con bechamel de arroz, pasas, piñones y queso vegano. 

Magnífica cocina que aúna vanguardia y tradición en el centro de Murcia

Desde que Tere del blog "Las María Cocinillas" anunció que abriría un restaurante en Murcia con opciones para todos, “me moría de ganas por ir”.

Barraca es un restaurante de cocina Mediterránea en el Barrio de Santa Eulalia (o como yo digo, en “el Malasaña murciano”) que combina la cocina tradicional con notas modernas. Como consecuencia de ello, las raciones no son muy abundantes, pero en ellas prima la calidad y la elaboración del producto.

 

Cocinan con productos de temporada, por lo que la carta va variando y, además siempre tienen platos fuera de ella.

De momento, en la carta tienen dos platos veganos y sin gluten: como entrante, el BABAGANOUSH CON VERDURAS ASADAS Y CEBOLLA ENCURTIDA, en el que el toque ácido de la cebolla contrasta a la perfección con el dulzor de la calabaza; y, como principal, el CURRY VERDE DE VERDURAS, aunque mi hermana y yo, como auténticas amantes del curry, nos esperábamos un sabor más intenso. No obstante, nos sorprendió gratamente su suave y delicado sabor, completamente distinto a todos los que habíamos probado antes.

Hay opción de pan sin gluten, aunque esto es lo único que me decepcionó. Me esperaba un pan más artesanal, aunque está en la línea de todos los restaurantes de Murcia que ofrecen esta opción.

Además, en la carta hay platos fácilmente veganizables como las ALCACHOFAS CON ALMENDRAS Y VINAGRETA DE TRUFA (el plato original lleva también cecina), que duraron en la mesa un abrir y cerrar de ojos.

En cuanto a los postres, podéis pedir el ARROZ CON LECHE DE COCO Y ZANAHORIA, el cual no puedo describir con palabras. ¡Tenéis que ir a probarlo!

Es el sitio perfecto para ir con tu familia ahora en Navidad (pues todos sabemos que no siempre es fácil convencerlos para ir a un restaurante vegetariano o vegano). Aunque os aconsejo que reservéis con antelación, ya que actualmente es el restaurante de moda.

Platos veganos, sin gluten y ecológicos en pleno centro de Murcia

¡Hola! Como os había prometido, en este post os desvelo mi otro restaurante favorito en Murcia: El Girasol Vegetariano.

Con la intención de su dueña de reivindicar que, comer vegetariano no significa quedarse con hambre, ni mucho menos, un equipo formado íntegramente por mujeres elabora cada medio día un nuevo menú con las verduras más frescas de la huerta murciana. Este se compone de ensalada+ plato principal+ segundo+ postre y siempre hay, al menos, una opción sin gluten y vegana (a la misma vez). La ensalada te la puedes preparar tú mismo de un buffet con hojas verdes variadas, verduras y hortalizas cortadas en juliana, frutos secos, semillas y SALSAS (os recomiendo la veganesa pero ¡cuidado!, es adictiva)

El primer plato suele ser una crema o sopa: de remolacha, espinacas y limón, de miso, de guisantes y leche de coco, de hortalizas blancas y pera…

En los segundos platos también se aprecia la influencia de otros países como Grecia, con su famosa mousaka de soja texturizada y bechamel o de tomate (con gratinado de frutos secos o de queso vegano) o incluso de México, con las tortillas de maíz rellenas de fríjoles y verduritas salteadas (¡mi perdición!).

Los postres (si es que aún tenéis sitio) tampoco se quedan atrás: el clásico murciano arroz con “leche”, mousse de chocolate con naranja, bizcocho de algarroba o mi favorito: ¡la tarta de zanahoria! Que, de hecho, fue con la que soplé las velas de mi cumple.

La carta de noche se renueva en función de la temporada: nachos caseros con salsa de cacao, curry o el pad thai (para mí, el plato estrella).

Y estar atentos a su Facebook porque de vez en cuando hacen talleres de cocina. Yo tuve la suerte, junto a mi madre, de participar en el último titulado “Guisos de invierno” y ahora tengo la suerte de poder disfrutar tooodos los días de su sopa de miso ;) Sobra decir que estoy ansiosa por que organicen uno de postres para hacerme con la receta de la tarta de zanahoria jajajaja

Si aún no habéis ido, seáis omnívoros, vegetarianos, veganos, celíacos o simplemente amantes del buen comer (como yo), no os lo podéis perder.

C/San José, 22, 30003

https://www.facebook.com/El-Girasol-vegetariano-621846587871603/

El jardín de los dragones

Es uno de mis restaurantes favoritos en Murcia (en verdad solo tengo dos, en otro post os hablaré del otro).

Para quien no lo conozca está en la C/Simón García, 57, 30003, muy cerquita de la Plaza de toros.

Este pequeño restaurante, cocina con verduras ecológicas y tiene varias opciones sin gluten. Además, no tienen problema en adaptarte cualquier plato.

A mediodía, tienen un menú a elegir entre dos platos principales, dos o tres segundos y postre por menos de 10 euros.

Seguramente pensáis que comer vegano es insípido y aburrido pero esto es sólo un mito. Si venís, ¡podréis disfrutar de infinidad de sabores y especias exóticas!

Por la noche, se cena a la carta. No os podéis perder las pakoras (verduras fritas con harina de garbanzo), la hamburguesa de berenjena o la sobrasada con sirope de agave y almendras tostadas. Os prometo que no tiene nada que envidiar a la de verdad, ¡está aún mejor! (Y no lo digo yo, sino mi madre, que no es vegana ni por asomo).

Pero “el jardín de los dragones” es más que un restaurante. Un día encuentras un mercadillo y al siguiente te sorprenden con un concierto nocturno o una “tortilla’s party”. Además, suelen tener exposiciones temporales. La última que vi (“Trofeos Veganos”) era de “Espartéame”, una empresa murciana de productos creativos 100% artesanales hechos con esparto. ¡Muy original! Aquí os dejo su página de Facebook por si queréis echar un vistazo: https://www.facebook.com/esparteame/

En serio, merece la pena que vayáis y no solo por la comida, yo siempre que voy salgo con una sonrisa.

Pero eso sí, si vais, os aconsejo reservar con antelación (sobre todo viernes y sábado). Y si me hacéis caso, solo os dejo ir para probarlo una vez, que luego cuando voy yo nunca hay sitio jajajaja

Espero que os guste ;)

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That’s the name of my favourite restaurant in Murcia. This is a bio, restaurant and gluten-free friendly restaurant in the old quarter, right next to the bullring (what an irony!).

This small and cosy local proposes a menu with a choice of two starters, two or three main courses and same for the desserts every day for the inexpensive price of 9,95 euros.

You may think eating vegan is tasteless, insipid and dull but they split up with all of this fake myths and make you enjoy an endless experience of flavours by cooking with exotic spices from Nepal and India.

At night, we can have dinner à la carte. You can’t go without trying their delicious pakoras (vegetables fries with chickpea flour), their eggplant burger or their Majorcan sausage with agave syrup and roasted almonds. OMG! I promise you that this vegan Majorcan sausage has nothing to envy to the real one, it’s even better! (And this isn’t me saying this but my mother who is not vegan at all).

But “el jardín de los dragones” is more than a restaurant. One day you can find a street market inside and the next day they can surprise you with a night concert or tortilla’s or sushi’s party. Also, almost every week they have one exhibition, the last one I saw was called “Espartéame” composed by animals heads made of esparto. It was pretty cool!

This original restaurant is really worth visiting not only because of their dishes but because of their delightful service that makes you leave with a smile.